Alta Fidelidad

Un sistema audiófilo es un sistema de alta fidelidad generalmente configurado en estéreo. Puede colocarse en una sala de estar (comedor, dormitorio, etc.) o, idealmente, en una sala dedicada y tratada acústicamente, dependiendo del nivel de rendimiento esperado. A diferencia del Home Concert, no incluye una parte significativa de video y no está espacializado por la adición de altavoces envolventes.
Estéreo no significa exclusivamente compuesto por dos altavoces, sino que reproduce una grabación de audio en dos canales frontales, derecho e izquierdo. Para ello, puede estar compuesto por solo dos altavoces o un conjunto de elementos, cada uno de los cuales es responsable de reproducir una parte del espectro sonoro.

Hay dos principales familias de sistemas audiófilos

Sistemas tradicionales

Generalmente están compuestos por elementos de construcción analógica, pero, a medida que la tecnología avanza, también pueden contener elementos "digitales", con la excepción de los procesadores de corrección de audio, que para los "tradicionalistas" se supone que distorsionan la calidad de la reproducción musical. Por lo tanto, todo el arte del audiófilo consiste en ensamblar varias máquinas y cables para lograr restaurar una señal coherente en una sala que generalmente no lo es.

Además, los "tradicionalistas" con mayor frecuencia se niegan a confiar los subgraves a uno o más altavoces dedicados (subwoofers) y consideran que un buen altavoz debe ser capaz de reproducir todo el espectro sonoro. Es un punto de vista.

Sistemas modernos

Generalmente están diseñados como los sistemas tradicionales, excepto por el hecho de que incorporan un procesamiento digital de señales para corregir la respuesta tanto del sistema en sí, debido a los defectos de cada uno de los elementos, como de la sala en la que está instalado. También integran la separación de la reproducción de los subgraves en uno o más altavoces dedicados (subwoofers), porque sus diseñadores han notado que la reproducción de los subgraves por los altavoces a menudo perturba la respuesta del altavoz en sí. Además, observaron que el ajuste de los graves y subgraves no siempre se puede hacer solo colocando los altavoces: esto afecta todo el espectro y no solo el de los graves.

La guerra hace estragos

Uno de los más grandes acústicos del mundo, JPL, con quien solíamos trabajar antes de que se jubile, y que trabajó toda su vida para casi todas las grandes compañías del planeta, especializado en la acústica de salas pequeñas (menos de 2500 m3), tanto profesionales como privadas, resumió la Hi-Fi tradicional con la siguiente máxima:
"Un sistema audiófilo llamado !tradicional” es un sistema no ecualizado en un entorno no tratado... cuyos defectos agradand a los propietarios."

Diseñar un sistema audiófilo

Existe una amplia gama de sistemas de audio de todos los tamaños, rendimientos y estéticas. Nuestro trabajo es identificar perfectamente las expectativas del propietario y ofrecerle el sistema más adecuado a sus objetivos y limitaciones.

Por supuesto, la principal limitación a tener en cuenta es la impuesta por la propia sala, lo que siempre nos ha hecho decir: El elemento más importante en cualquier sistema de audio Alta gama es, naturalmente, la propia sala de escucha.

La elección de la sala y el programa que se reproducirá allí determinará el sistema de altavoces necesario para lograr el resultado deseado. La elección de los altavoces y el programa determinarán la elección de la electrónica más adecuada para la situación.

Es porque la coherencia de los sistemas que instalamos en las instalaciones de nuestros clientes es una prioridad para nosotros que, en casi veinte años, rara vez hemos tenido que retocar un sistema para mejorarlo, salvo por la integración de nuevas tecnologías, incluidos los procesadores.
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